SUBIDA A LOS CIELOS Y BAJADA A LOS INFIERNOS DE MAMÁ NARCISISTA

Subida a los cielos: la ascensión a la cima.

Mamá narcisista se posiciona siempre en un discurso inamovible dónde ella siempre tiene la razón.

La perversión de mamá narcisista es no respetar la subjetividad de la otra persona. Esto es especialmente fácil para ella hacerlo con sus hijos que están a su merced, totalmente dependientes, y el efecto que produce en estos es de angustia, de vergüenza y de culpa. Sin embargo, mamá no experimenta culpa alguna por lo que hace los demás: se siente con derecho a ello. Así dirá: “son MIS hijos”.

A los demás sólo les tiene en cuenta como destinatarios de sus actos perversos de manipulación y control para sentirse ella bien. Culpa a los demás de sus acciones, les carga con sus errores, mienten para distorsionar la verdad y ajustarla a la suya propia, y las víctimas acaban dudando de su propio criterio y capacidad, produciéndoles un daño muy profundo y difícil de superar.

Hay una falta de capacidad de aprendizaje: no aprende de sus errores, porque en ella “no ve error” y los proyecta en su entorno. Esto la lleva a una repetición eterna de estos mismos patrones conductuales. En esta estructura mental no hay posibilidad de cambio.

Su pareja, amigos, entorno… son manipulados por ella, que crea separación entre las personas para que se relacionen “a través de ella”, como si ella fuera la única en quien pueden confiar.

Así, cuando están a su merced, empieza con dramas, con presión para que hagan lo que ella quiere, con menosprecios “cuando le fallan” al no hacer lo que ella les pide o espera, y con descartes cuando ya no se dejan manipular y ha encontrado un nuevo “follower” en forma de otra pareja, amiga, etc…

En el caso de sus hijos es más terrible porque éstos no tienen opción. Además, normalmente la pareja de mamá narcisista se hace cómplice al callar, al ignorar, al mantenerse a un lado mientras ésta abusa de los pequeños. Así mientras sus hijos son pequeños están completamente a merced de la madre y aprenden a sufrir el abuso sin rechistar, a normalizar los comportamientos de mamá e incluso a justificarlos

Su pareja está para cuidarla

Mamá narcisista se despreocupará de todo en cuanto a responsabilidades, y generalmente exigirá a su pareja que la mantenga, que la cuide, que le dé lo mejor. Sin embargo, ella controlará todo: el dinero, los amigos y relaciones de su pareja, qué hace con el dinero y que no puede hacer…

Cuando mamá narcisista tiene dinero lo utiliza para mantener a su pareja e hijos a su lado. Así les mete miedo sobre sus capacidades para generar dinero, te dirá lo difícil que es todo, para mantenerte atad@ a ella.

La oveja negra está para cuidarla: “me tienes que cuidar, me lo debes”

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Mamá narcisista en su realidad paralela ha decidido que su chivo expiatorio es como su cubo “basura”: de hecho, es sobre quién ella proyecta todos sus errores y problemas. Pues bien, en su cabeza este chivo expiatorio debe darle gracias y está en deuda infinita (nunca se acaba de pagar, como en las mafias) porque ella le dio la vida, y la mantuvo a pesar de su ineptitud e invalidez.

Así con la oveja negra, tratará de cargarle con su vida y problemas. Si necesita dinero se lo pedirá y si no se lo dá la hará sentir culpable: “con lo que yo he hecho por ti!! Con lo que yo me he sacrificado…” . Si ella deja el trabajo, querrá que el chivo la mantenga.

En general, espera de este chivo que, o bien viva con ella y la cuide de por vida, sin derecho a tener su propia vida; o bien se irá a vivir con el chivo para lo mismo. “Yo te he dado la vida y me lo debes”.

Recuerda: Te dió la vida pero no tiene derecho a quitártela.

Bajada a los infiernos: el declive

En algún momento la gente se cansa, se rebela, se aleja y todo el mundo le dá la espalda. Mamá narcisista ha vivido de las apariencias, de esa doble cara, pero cuando los demás dejan de creer en ella colapsa. Porque ella “es” sólo si “los demás la ven y la adoran”. Ese es el trauma. Esa es la herida narcisista: “necesita ser vista y reconocida y valorada”.

Cuando las personas le dán de lado, primero se produce un estallido: mucha ira, un gran enfado, pataleta, insultos, rabia… cuando no se hace lo que ella quiere. Va a negar la realidad a través de la fantasía. Ella se niega a adaptarse a la situación y pretende que todos los demás se adapten a ella y su realidad distorsionada.

Cuando ya no queda nadie: pareja, amigos, vecinos… la madre narcisista trata de “tirar” de hijos. Algunos hijos la evitarán, pondrán excusas… Pero la mayoría acaban cediendo a la presión y a la culpa aun cuando estar con ella les deje agotados, tristes, humillados…

Este ocaso se puede dar a cualquier edad: la vejez o antes. Si de produce antes, la madre narcisista caerá en depresión. Será entonces cuando trate de manipular de nuevo a su entorno, y quizás vaya al médico. Se resistirá a ir a cualquier psicólogo o psiquiatra: “yo no estoy loca”-dirá.

La vejez

Con los años, su narcisismo se va alimentando y su grandiosidad puede colapsar en apartar a las personas de su lado.

El ocaso de mamá narcisista puede terminar de diferentes maneras:

-. Quizás logra mantener a su pareja codependiente hasta el final. Esta normalmente muere antes pues se descuida para cuidar de ella. Mamá narcisista se enfadará con él y dirá: “¿y ahora qué voy a hacer yo? ¿ahora quién me cuida?”

-. En otros casos, logran incapacitar a un hijo o una hija, que vive con ellas y las cuida hasta que se mueran, viviendo una relación de amor-odio con mamá y de culpa-vergüenza consigo mism@s.

-. En el peor de los casos, habrá cargado contra todo su entorno: herman@s, hij@s, pareja… y se quedará sola.

• Quizás tenga medios para pagar una atención en casa, pero no le durarán porque volcará sobre estas personas toda su rabia y abuso.
• O quizás acabe en un asilo, y se hará muy difícil para sus cuidadores tratar con ella en el dia a dia, recibiendo insultos y abusos.

¿y ahora qué?

Si tu madre es narcisista, debes liberarte de la culpa y soltar esa deuda infinita por la vida. Tener hijos es decisión y en última instancia, responsabilidad de los adultos que los engendran. No eres la madre ni el padre de mamá. Te dió la vida pero no permitas que te la quite.

Liberarte de la culpa no es tarea sencilla porque esta culpa viene de un apego traumático cuya impresión profunda está en todo tu organismo y trabaja contra ti y a favor de mamá según un programa infantil establecido por ella en ti.

Si necesitas ayuda para la gestión emocional de tu relación con mamá, puedo ayudarte. Escribeme a  info@anapazo.com o reserva una sesión diagnóstico ( para aclarar tu caso y dar los primeros pasos hacia la recuperación de tu seguridad y tu confianza en ti mism@.

Si te ha servido o tienes alguna pregunta, déjame por favor tu comentario aquí abajo 🙂 Te responderé en cuanto pueda!